septiembre 30, 2025

Entre todos los países de América Latina, hay seis en los que la abundancia de su biodiversidad es la nota preponderante. Brasil, entre ellos, se destaca por poseer en la Amazonía, uno de los territorios más biodiversos del mundo. Hoy Greenpeace te invita a conocer cuál es el escenario actual de esta región dentro de un contexto de cambios fuertes por el aumento de la temperatura del planeta. 

El coloso Brasil, el gran gigante verde,es el país conocido globalmente como el “pulmón del planeta” . Y, lo cierto , es que hay razón en que así sea, ya que es el territorio en América Latina que cuenta , a lo largo de toda su extensión, con la mayor biodiversidad del planeta. Los expertos y las estadísticas lo confirman y han dejado constancia de que al momento, este vergel natural, es el hogar de al menos 2,4 millones de especies. 

Esta magnitud colosal de esplendor natural en especies de fauna y flora de tierra y ríos, equivale a una cifra que va entre 15 y el 20% de toda la biodiversidad que existe en el planeta . Es decir en una palabra,que Brasil, cuenta con una de las mayores biodiversidades del globo y la mayor parte de ella se oculta en el interior de la Amazonía. Esta región se caracteriza por albergar el bosque tropical más extenso del mundo que a lo largo de su extensión cubre amplias porciones de territorios nacionales de ocho países entre los que se encuentran, los exuberantes  Brasil, Perú y Colombia,  y gran parte de  Bolivia,Guyana, Ecuador, Venezuela, Surinam y la Guayana Francesa.

 Pero, para ser exactos, los expertos afirman que a Brasil, el gran gigante de sudamérica, en materia de cantidad de especies relevadas, también hay añadirle aquellas que todavía no han sido clasificadas. De hecho, en las zonas más espesas y profundas de la Amazonía, el hombre con su afán de exploración, todavía no ha podido acceder. La imposibilidad de trazar caminos seguros, los peligros que acechan a cada paso por las trampas naturales del suelo y los riesgos de ser picados o atacados por los animales que conforman este entorno hacen a la vez, de cerco y freno protector contra cualquier hazaña de exploración y relevo científico.Por ello, se cree que aún la naturaleza guarda misterios por develar y nuevas especies de animales y plantas con sus beneficios y bondades para el bien del hombre. 

Brasil, un gran reservorio de agua dulce 

Los expertos en conservación y biólogos, llevan tiempo buscando resaltar la importancia de los recursos que resguarda Brasil para el mundo. Principalmente, que en su ríos, cuencas hídricas y suelo , resguarda alrededor del 20% de toda el agua dulce que posee el planeta. Por otro lado, sus humedales, manglares, bosques y sabanas, conforman ecosistemas claves para el equilibrio natural tanto para este país como para todo el continente de América Latina y el mundo. La magnitud de su importancia , indican los expertos, es difícil de dimensionar para el hombre común y en conjunto su alto valor como estabilizador climático y biológico es realmente muy significativo para la conservación de toda la biodiversidad mundial.

En el concierto de países , Brasil ocupa el segundo lugar por detrás de Australia en el ranking de los países más biodiversos del mundo. Sin embargo, hay datos puntuales que aún no se han podido cuantificar en materia de pérdida de especies. Desde el año 2019, a lo largo de todo el territorio brasilero y en puntos candentes o “hot spots” de biodiversidad de la gran selva amazónica, se vieron gravemente afectados a causa de los incendios forestales masivos que se extendieron por largos meses . A consecuencia de ello, millones de hectáreas se han visto arrasadas, el fuego con su voracidad implacable apagó miles de vidas de animales autóctonos y muchas variedades de especies de plantas y vegetación. La fauna y flora que habitaba en estas porciones estratégicas de biodiversidad del gigante sudamericano recibió una estocada letal que aún no ha podido ser dimensionada en toda su totalidad. 

Actualmente, entre las especies más asombrosas que aún posee Brasil , se encuentran el títí negro, la rana dorada venenosa, asi como también una planta única, el bambú Apoclada simplex, propio de esta región de la amazonía . Ante el cambio climático y la amenaza por incendios y avance de la deforestación, Greenpeace, llama a los países de la región y a toda la sociedad latinoamericana, a tomar conciencia de la gran riqueza y fragilidad que guarda esta porción clave del planeta. Su urgente salvaguarda necesita del fuerte compromiso de los gobiernos y del diseño de estrategias conjuntas para la protección de la biodiversidad y los recursos naturales. Una misión que no permite dilaciones dado que este es el único legado que debe ser conservado para el usufructo sostenible de las próximas generaciones.