Al pensar en ciudades, lo primero que aparece en nuestras cabezas es el color gris. Edificios altos, asfalto, transporte público, y por lo tanto, ausencia de verde. Si bien sigue estando presente el contraste entre ciudad y otros ambientes, cada vez son más los proyectos que buscan relacionar la relacionar la biodiversidad y las grandes ciudades.
Aunque se suele contraponer las ciudades a los espacios naturales donde la diversidad en especies es abundante, los movimientos climáticos actuales así como también los proyectos ambientales buscan asegurar que vivir en una ciudad no implica una ausencia completa de biodiversidad, y los huertos urbanos son una de las tantas tendencias que prueban que el ser humano puede mezclar diferentes sistemas.
¿Qué encontrarás en este artículo? |
1 . Introducción |
2 . Biodiversidad en la ciudad |
3 . Huertos domésticos, una tendencia urbana |
3.1 Cuidado y expansión de los huertos urbanos |
4 . Conclusión |
Biodiversidad en la ciudad
Definiendo a la biodiversidad como la variedad de plantas, animales, y otros organismos vivos que se encuentran en un sistema, lo primero que solemos asociar a las ciudades es la falta de esta diversidad.
Debido a las fuertes repercusiones que las ciudades traen aparejadas consigo cuando se trata de influir sobre el medio ambiente, debido a todos los cambios que estas implican sobre el medio natural, se suele hablar de una ausencia de biodiversidad.
Sin embargo, en años recientes se ha buscado acabar con esta oposición entre ciudades y medio ambientes naturales para dar paso a proyectos que buscan demostrar que la biodiversidad en las grandes ciudades metropolitanas es posible.
Las ciudades ya no se definen únicamente por representar grandes puntos grises sobre el territorio. Los espacios verdes y azules han comenzado a interrumpir la monotonía de las capitales metropolitanas, y es la existencia de estos parques, jardines, y estanques de agua, la que permite que se realice una complementariedad entre diferentes espacios.
Además, los planes medioambientales que han buscado reducir los desechos producidos por las ciudades no solamente se han enfocado en cambiar el paisaje una vez que uno deja la conformidad de sus casas. También se han creado proyectos para cuidar el medio ambiente desde la casa de uno mismo, y mientras algunos han fracasado, otros se han transformado en tendencias que continúan expandiéndose y acentuándose hasta el día de hoy. Una de estas tendencias son los huertos urbanos.
Huertos domésticos, una tendencia urbana
Si bien la presencia de flores y plantas es un detalle que nos hemos acostumbrado a ver desde hace mucho tiempo atrás en los espacios domésticos, desde la presencia de grandes macetas en balcones hasta pequeñas macetas que caben como acompañantes sobre los escritorios.
Recientemente se ha introducido la idea de que verduras y frutas también pueden ser compañeras dentro de nuestros propios hogares. Los huertos urbanos, o en su defecto domésticos, se definen como los espacios tanto al aire libre como de interior en un lugar doméstico que están dedicados al cultivo de verduras y frutas, entre otras.
Desde huertos colgantes, en cajones, o en macetas, entre otros, la presencia de diferentes tipos de plantas dentro de los hogares es cada vez más notable.
La presencia de estos huertos que varían en tamaño dependiendo del espacio disponible, permiten que las personas tengan la posibilidad de cultivar sus propios alimentos sin abandonar la familiaridad de sus hogares.
El desarrollo de estos huertos domésticos permiten el crecimiento de cultivos libres de los productos químicos que generalmente se atribuyen a las frutas y verduras compradas en los grandes supermercados, y también brindan la posibilidad de seleccionar qué plantas crecer dentro del espacio cotidiano de uno mismo.
Cuidado y expansión de los huertos urbanos
El desarrollo de huertos domésticos es posible únicamente si se tienen los cuidados necesarios a la hora de plantar estos cultivos, y se presta atención a los detalles más importantes para que las plantas puedan crecer en las condiciones adecuadas.
Desde la cantidad de horas bajo el sol, la importancia de la luz solar, la cantidad adecuada de agua que una planta precisa, y el sustrato y fertilizantes que se utilizan a la hora de plantar cultivos, los huertos domésticos han de ser creados y mantenidos con responsabilidad.
Ya sea en macetas o en patios y jardines, y terrazas y azoteas, una biodiversidad de especies es posible en el centro de los espacios domésticos en caso de respetar los pasos adecuados y seguir las instrucciones indicadas por expertos.
La presencia de huertos urbanos representan un aporte a la sostenibilidad de especies y permiten que las ciudades ya no únicamente se caractericen por la falta del color verde.
Conclusión
Evitan el transporte que los grandes mercados traen aparejados consigo, y crean equilibrio entre las ciudades y el medio ambiente. Los huertos domésticos brindan la posibilidad de consumir productos completamente hechos en nuestras casas, y representan un beneficio hacia la preservación de la biodiversidad de plantas que ahora ya no es tan extraño encontrar en las ciudades que vivimos y en nuestras propias casas