
La imagen muestra una variedad de semillas y granos almacenados en un frasco de vidrio, símbolo del esfuerzo por conservar la biodiversidad agrícola frente al cambio climático.
Miles y miles de alternativas aparecen cuando se trata de conservar y proteger la biodiversidad– Esta palabra refiere a la variedad de vida que hay en la naturaleza, con millones de especies, animales, vegetación, bacterias, organismos, etc. Todo esto representa la flora y fauna de la Tierra y solo hay una misión: protegerla.
¿Protegerla de quién? No es ajeno que existe una crisis climática que parece arrasar con todas las fuentes naturales. Los efectos del clima, patrones y sus variaciones abundan en un mundo que no da abasto. La contaminación, los incendios forestales, inundaciones, terremotos, tsunamis, son algunos ejemplos que pasan a la categoría de catástrofes ambientales.
Las especies son las que padecen estos efectos en primera plana. Los ecosistemas son aquellos denominados hábitats donde interactúan y se relacionan entre sí miles de animales y plantas que están a la intemperie. Todos los ejemplos mencionados no solo desvanecen los lugares donde se desarrollan los mismos, sino que atrasa el trabajo realizado y aumenta una crisis.
En la búsqueda de las alternativas, por patrones geográficos y dependiendo el compromiso que tenga cada nación con el medio ambiente, se implementan políticas para preservar la naturaleza. Cada país es único y diferente y actúa en base a sus necesidades, pero también se necesita una cooperación global para atacar todos juntos a la crisis climática.
Así como se festejó de manera explosiva el acuerdo de París entre varios países para evaluar, analizar y contraatacar al cambio climático, desde 2008 se recuerda una acción más que importante en la conservación de la biodiversidad. Una bóveda, o banco que cuenta con un millón de especies guardadas para protegerlas de los males del medio ambiente.
Ubicada en Noruega, en un santuario más que protegido, esta acción significó y significa un hito en la biodiversidad, con millones de especies que se conservan ante los efectos de la crisis. Hay más de 90’ depósitos y la bóveda cuenta con una protección especial para conservar la diversidad biológica.
A continuación, en este artículo de biodiversidad en específico, veremos en detalle algunas características del banco del millón de especies, ubicado en Noruega y el funcionamiento típico que se le da.

Características del banco de millón de especies en Noruega
Banco Global de Semillas de Svalbard, ese es el nombre original del banco que reúne más de un millón de especies. Las inundaciones, los incendios y las catástrofes mundiales son síntomas de que pueden entorpecer el proceso de las mismas. Por ende, se conserva dentro de más de 90 depósitos para que no sean amenazadas.
Tal y como dicen los artículos más destacados del asunto, funcionan como copia de seguridad en caso de que los efectos del cambio climático arrasen con la biodiversidad. Se estima que hay más de 60.000 variedades de cultivos y vegetación y por eso su conservación es esencial.
Luego, la bóveda, que queda en una isla de Noruega, en una de las partes más altas del planeta, está impermeabilizada con una temperatura debajo de los cero grados para conservar mejor a las especies. Que las semillas estén en temperaturas que oscilan entre los -10 grados es para asegurar que su vida será de largo plazo.
Por ende, los especialistas o empleados de la bóveda que entran cada tanto, deben controlar y evaluar la situación de las semillas y actualizar el stock en caso de que lleguen más especies para conservarse. Hay imágenes que muestran a los trabajadores con trajes especiales para soportar las bajas temperaturas.
Funcionamiento típico
Para que quede claro, a la bóveda no se ingresa de forma cotidiana ni muchas veces. En caso de que algún país solicite semillas, que sirven como copias de seguridad, la bóveda noruega se abre y se juntan las necesarias para abastecer a los lugares. Luego, este banco suele estar cerrado y muy protegido.
Justamente, la idea de este banco es conservar la mayor cantidad de especies y semillas en caso de que la crisis climática arrase con los ecosistemas y hábitats de la biodiversidad. Es una bóveda preparada para recibir impactos ambientales, aunque algunas veces sufrió unos descuidos.
Ante los efectos constantes del clima, Noruega, desde 2008 ofrece este servicio a nivel mundial para que los países y especialistas puedan preservar la variedad de vida.
Conclusión
Este banco del millón de semillas, ubicado en Noruega, en la isla de Svalbard, alberga miles de especies y semillas que se conservan a temperaturas polares para mantener su ciclo de vida. ¿Cuál es el objetivo? Evitar que se pierdan en las catástrofes ambientales.