Proteger la biodiversidad del Planeta debe ser un compromiso conjunto de todos los países del mundo. Por ello, la creación de una Red de Seguridad Mundial es un paso favorable , necesario y auspicioso en este sentido.
Resguardar la biodiversidad en el Planeta implica dar pasos conjuntos y abarcar con legislaciones y acuerdos gubernamentales todos los frentes a proteger en la Naturaleza para el bien de las próximas generaciones.
En este sentido, uno de los países que ha mostrado más fuerte su compromiso para lograr avances concretos en el corto plazo, es Alemania. Un destacado equipo de científicos que forman la Academia Alemana de Ciencias Ambientales, ha trabajado arduamente para lograr consenso entre los países centrales y periféricos para llevar adelante acciones conjuntas y medidas legales de contención en el ámbito internacional.
La Academia Alemana publicó en 2022 un trabajo que se basó en la elaboración de un mapa global para determinar qué áreas naturales del Planeta era necesario conservar y cómo debería realizarse esta acción para poder enfrentar las amenazas potenciales que podrían acontecer debido al cambio climático, el deterioro y pérdida acelerada de la biodiversidad en todas las regiones del mundo.
Ampliación concreta de las zonas mundiales a resguardar
Este marco o red de seguridad ambiental que proponen los científicos busca ampliar las zonas que en la actualidad se encuentran bajo una activa protección por parte de organismos ambientales y gubernamentales. Los investigadores, en su informe han puesto en relieve que , a pesar de que el 15 % de la superficie de la Tierra se encuentra protegida, se deben encarar acciones tendientes a resguardar al menos un 36 % del total de la superficie del planeta para evitar un colapso ambiental irremediable . Sólo de esta manera estas áreas protegidas , en caso de presentarse una emergencia climática , serán eficaces a la hora de funcionar como colchón estabilizador del clima a nivel global.
En consonancia con la ampliación de las zonas terrestres a proteger, se ha llegado a un acuerdo global a principios de 2023 para salvaguardar la biodiversidad marina con la firma del Tratado del Mar. La Autoridad Internacional de los Fondos Marinos encargada de supervisar la actividad comercial en los océanos decretó que a partir de ahora “toda actividad comercial de caza y pesca que sea realizada por los países en el lecho submarino, deberá regirse por normas medioambientales y de supervisión para poder hacer un seguimiento efectivo de las mismas y corroborar que se lleven a cabo de modo sostenible y responsable»
El acuerdo dejó establecido un equitativo reparto de los recursos genéticos del mar. Estos recursos son de vital importancia para toda la humanidad ya que son la base de muchas industrias que tienen como fin la salud. En este sentido ,las grandes corporaciones farmacéuticas han bregado por una adecuada conservación de esta amplia gama de recursos marinos que son irremplazables . El Dr José Casaubon, integrante del equipo legal del Tratado del Mar afirmó que “es de crucial importancia de cara al futuro , poder resguardar a la rica flora y fauna marina, base de toda la farmacéutica y fundamental para garantizar la salud integral de los seres humanos. Perder estos recursos, implica perder una fuente invaluable de salud para toda la humanidad. Garantizar los recursos genéticos implica poner en vigencia y cumplir las normativas globales elaboradas por los países para garantizar la protección de los mismos” indicó el Dr Casaubon.
Garantizar la equidad en el acceso a los bienes del mar
El Tratado sobre el Mar también sentó las bases para poder garantizar la equidad de los países del mundo en el acceso a los bienes disponibles de los océanos. Según los firmantes, este acuerdo tiene especial consideración de las naciones más pobres, que ante una amenaza ambiental en el futuro, se encontrarán de todo vulnerables a la hora de hacerles frente del modo adecuado. Las naciones más prósperas cuentan con los medios económicos necesarios para explorar los océanos, pero las más pobres necesitan que se les garantice que los beneficios podrán distribuirse de manera equitativa en un futuro.
En este sentido, el acuerdo dejó establecido un área del océano bajo la denominación de ‘Aguas Internacionales’ que procura ser un espacio internacional de pesca , navegación e investigación, al cuál todos los países podrán recurrir de modo libre y sin restricciones de ningún tipo por parte de ningún país central.