El 22 de abril se celebró el Día Mundial de la Tierra y no es una fecha más. Un día para concientizar, educar y sobre todo fomentar el cuidado y protección del medio ambiente. Con el paso de los años, la fecha se transformó en una jornada de reflexión más que de celebración
El Día Mundial de la Tierra cada año tiene un lema y una visión. Si bien siempre la misión es cuidar el medio ambiente, el futuro deseado se modifica ante la crisis climática que avanza y repercute de lleno en el planeta, producto de la actividad humana en gran parte.
El cambio climático es la mayor amenaza con su variaciones en todos los ecosistemas y las noticias malas que llegan desde todas partes del mundo: inundaciones, con grandes caudales de agua, incendios forestales que arrasan en ciudades u olas de calor extremas que no dan abasto.
El otro foco es la contaminación. El ecosistema marino es uno de los más perjudicados, con los océanos llenos de desechos, microplásticos y este material que contamina toda la cadena animal.
Y por último, ante la pérdida de biodiversidad, el foco es en su conservación, con mecanismos que surgen de los especialistas. Y justamente, aquellos biólogos apuntan a la urbanización para fomentar el cuidado del ambiente.
La urbanización y la biodiversidad tienen una relación muy estrecha. Las grandes ciudades, con grandes poblaciones y fruto de la actividad económica y de los bienes y servicios, tienen la misión de proteger el medio ambiente ya que la contaminación de CO2 se desprende de lo urbano.
La actividad humana es la mayor responsable de deteriorar el planeta tierra. La contaminación del CO2, la masividad del plástico, los combustibles fósiles y los desechos son algunos ejemplos que no ayudan y además generan un malestar social.
A continuación, en este artículo, veremos como el Día Mundial de la Tierra llamó a ser más responsables con el medio ambiente y como las grandes ciudades pueden ser la rueda de auxilio para la protección del mismo.
¿Qué encontrarás en este artículo? |
1 Introducción |
2 Día Mundial de la Tierra |
3 La urbanización: la esperanza |
4 Conclusión |
Día Mundial de la Tierra
El Día Mundial de la Tierra siempre tiene el mismo lema, quizá cambia algún objetivo pero siempre apunta a lo mismo: además de detectar los problemas, el futuro es la esperanza pero también el presente, así como la sostenibilidad como concepto clave.
Este año los especialistas han descrito las consecuencias del cambio climático, revelaron la pérdida de biodiversidad en los ecosistemas y a fines de abril hubo varias cumbres en Norte América para tratar la situación y que no se agrave.
El tema de plásticos ha sido vital este año y se le dio mucha importancia. Este material, lamentablemente está muy presente en los océanos y también en los humanos, ya que son muy diminutos y estas partículas, sin que nos demos cuenta, ingresan en nuestra composición.
La urbanización: la esperanza
¿Por qué las grandes ciudades son la esperanza? De allí se emiten las emisiones del dióxido de carbono y sin un control responsable y sobre todo sostenible de la contaminación será imposible combatir el cambio climático y ayudar a la Madre Tierra.
Hay varios aspectos positivos: algunos países nórdicos (Dinamarca, Suecia) tiene apuntado para 2050 ser territorios sin emisiones de carbono. ¿Cómo? A través de las energías renovables, que son fuentes de la naturaleza y que no implican procesos contaminantes.
Además, estos países son muy responsables ante la división de residuos, como también lo es Corea del Norte, muy implicado en la causa. El reciclado es un proceso que beneficia a las sociedades y la economía circular, con productos que al no ser desechados pueden cobrar un nuevo valor y volver a ser utilizados.
Otra cosa es el Acuerdo, cumbres u objetivos que trazan los gobiernos para darle un respiro a la Tierra. El Acuerdo de París fue muy importante porque allí los gobiernos se han propuesto reducir las emisiones de contaminación para los siguientes años.
En fin, la urbanización será clave en el futuro. Apuesta a la utilización de vehículos eléctricos y eliminar los combustibles fósiles, la conservación de los bosques y sus árboles y la implementación de energías renovables y parques verdes.
Conclusión
El Día Mundial de la Tierra no es uno más y ha quedado demostrado con su visión para el futuro. Los problemas están a la vista y el accionar tiene que ser para el futuro como para el presente, que resume a la sostenibilidad.
Las grandes ciudades, por su población e impacto en el mundo, están llamadas a ser las responsables de cambiar la ecuación y que la Madre Tierra no se deteriore más.